Comparativa 250: 2t vs 4t...Gas Gas EC250Racing 2012 vs. Yamaha WR250F 2007/14

Hola a todos!

 

Últimamente he tenido la suerte de poder tener conjuntamente en mi garaje a estas dos grandes motos (Gas Gas EC250 Racing 2t modelo 2012 y Yamaha Wr250f 4t modelo 2007/14) durante varias semanas, y ya que se trata de dos modelos válidos y actuales, voy a tratar de aportar mis conclusiones sobre cada uno de ellos por si a alguien le puede servir de ayuda.

 

Antecedentes…:

- La Gas Gas la compré nueva en el 2012, le he hecho 11.000km…y 0 averías.

- La Yamaha la compré usada y con 9.000km. Es del año 2007, ha tenido 1 solo propietario, y está en un estado absolutamente impecable. Aporto mis conclusiones después de haberle hecho ya más de 1.000km.

 

Nivel y tipo de conducción…: dominguero, a ritmo tranquilo/alegre…no dando gas a fondo.

 

Tipo de terreno…:

- aprox. 5% enlaces por asfalto

- aprox. 35% Pistas en más o menos buen estado

- aprox. 35% Camino pequeño roto o muy roto

- aprox. 20% Sendas

- aprox. 5% Trialeras de dificultad baja/media

 

Calzado, desarrollo y escape…:

- Neumáticos: Maxxis EnduroPro detrás y delante en la Gas Gas, y Maxxis EnduroPro detrás y Michelin delante en la Yamaha.

- Desarrollo 13/50 en las dos motos

- Gas Gas con silencioso FMF, y Yamaha con línea completa colector+silencioso Akrapovic

 

EMPIEZO

 

A primera vista…: primer impacto visual muy bueno en ambas motos….pero ya desde ese primer momento se pueden apreciar grandes diferencias entre ellas…diferencias que luego aparecerán en muchas otras facetas. La Gas Gas se presenta con una combinación llamativa de colores rojo y blanco, que junto al escape FMF le confieren un aspecto más racing, y muestra una silueta más pequeña, estrecha y estilizada. La Yamaha por el contrario, tiene una estampa más clásica y conservadora, con una combinación sobria de colores azul y blanco, al tiempo que se la ve más musculosa, más ancha y más voluminosa.

 

Acabados…: A poco que uno “mete mano” para realizar tareas cotidianas de mantenimiento, en general se aprecia una calidad bastante superior en la Yamaha.

Por ejemplo en la Yamaha, cuando sacas un plástico notas que conjuga una buena mezcla entre “cuerpo” y flexibilidad, y luego cuando lo vuelves a montar, los agujeros para la tornillería de fijación te coinciden a la primera, además de que los tornillos son hexagonales (llave de 8 o de 10) por lo que es fácil manipularlos, y difícil que se estropee su cabeza. Por el contrario, en la Gas Gas los plásticos no transmiten la misma sensación calidad, pero no por ello quiero decir que sean de mala calidad, sino que parecen más endebles…sus tornillos de fijación ya sí que pertenecen a 2ª división, pues son más afines al bricolaje casero que al uso como elemento de fijación al que están destinados. En este sentido se usan varios tipos de llaves diferentes, y hay que ir con cuidado de no pasar las cabezas de los pequeños tornillos.

También el guiado de los cables y su terminación se aprecia mucho más cuidado y mejor elaborado en el caso de la Yamaha.

Mención especial merece la pata de apoyo: en la Yamaha es robusta, estable y con un mecanismo hecho a conciencia, mientras en la Gas Gas simplemente es una mierda endeble, e inestable. Hasta 3 veces se me partió el tornillo que al mismo tiempo hacía de eje de pivotaje de la pata…así que lo resolví haciendo un sistema de anclaje adicional que permite el pivotaje de la pata, al tiempo que no jodiera su rosca de fijación.

 

Ergonomía a los mandos/posición de conducción…: Es buena y es fácil familiarizarse con las dos motos ya que la posición resultante entre estribos y manillar es parecida, además de que la anchura y las formas de éste último es igual en ambos casos. El asiento sin embargo es bien distinto…ligeramente más plano en la Gas Gas, pero con forma más inclinada en ambos laterales, cosa que la hace más estrecha de cintura, y su funda agarra bastante aún en las subidas más pronunciadas. El asiento de la Yamaha tiene la apariencia de ser más mullido, pero en cambio es tanto o más duro que el de la Gas Gas, es más recio, su funda resbala (seguro que estos dos últimos detalles son debidos a su antigüedad), y su geometría -aunque no es mala- es más vetusta.

 

Frenos…: Poco que decir…buen tacto y potencia en ambas motos.

 

Embrague…: Buen tacto y accionamiento en ambas motos. En mi caso, en situaciones donde haces trabajar mucho el embrague, el de la Gas Gas tiende a fatigarse y perder precisión antes que el de la Yamaha.

 

Labores de mantenimiento…: Básicamente voy a centrar mis opiniones en la limpieza del filtro de aire, y el cambio de aceite…ya que obviamente la limpieza y el engrase de la cadena son iguales en ambos casos.

La limpieza del filtro de aire resulta muy diferente en cada una. En la Yamaha tan solo tienes que abrir manualmente el cierre de la tapa lateral abisagrada, y ya ponerte manos a la obra con la extracción y limpieza del filtro. Sin embargo, en la Gas Gas esta labor es tediosa: hay que extraer el tornillo que fija el asiento ubicado bajo el guardabarros trasero, así como seguidamente quitar una caja plástica destinada a albergar la batería en el caso de incorporar el arranque eléctrico. Ambas cosas, asiento y caja, necesitan de diferentes llaves para su extracción.

El cambio de aceite también es bien distinto, y en este caso es mucho más sencillo y rápido de realizar en la Gas Gas. Una vez hemos arrancado las motos unos minutos para calentar el aceite, vaciarlo en la 2t es un momento, mientras que en la Yamaha es un protocolo de varias operaciones bastante más laborioso (obviamente influye mi falta de práctica, pero aún así te ocupa más rato).

 

Puesta en marcha…: Ambas arrancan bien.

La Gas Gas únicamente se arranca a patada (a no ser que sea una versión que incorpore arranque eléctrico). En frío normalmente arranca bien: tiras de estárter, un par de patadas y voilà. En caliente también arranca fácil. No obstante, es necesario coger práctica, ya que si no lo has hecho nunca, al principio cuesta un poco pillarle el punto. El problema del arranque a patada (o al menos para mí) es cuando te quedas “clavado” en alguna trialera en mala postura, o cuando tienes que parar y arrancar muchas veces seguidas. La verdad es que al principio no le di ninguna importancia a este detalle…y sin embargo con los años me harté de ir dando patadas. Intenté comprar el kit de arranque eléctrico, pero me fue imposible conseguirlo.

La Yamaha también arranca bien a patada tanto en frío (tirando de estárter) como en caliente…e igual ocurre con el arranque eléctrico. Lo cierto es que la comodidad del arranque eléctrico es una maravilla…aunque sea a costa de ganar unos kilos extra.

 

Suspensiones/Horquilla delantera…: Dos mundos aparte (siempre desde la óptica del endurero dominguero que va a ritmo tranquilo/alegre y no dando gas a fondo).

Gas Gas: monta horquilla invertida Marzocchi Ø48 de doble cartucho. Tal como viene de fábrica es una piedra, que te escupe a cada impacto. Ni configurando el taraje lo más blando posible se consigue un aceptable grado de confort. Es necesario llevarla a un preparador para que la cosa mejore notablemente…y aún así mantiene tendencia a la dureza, que da confianza si vas rápido, pero que pasa factura si no estás fuerte.

Por tanto, si quieres ir rápido, la horquilla Marzocchi bien preparada y ajustada será muy buena opción…pero si vas de tranquis no es el material más adecuado.

Yamaha: monta horquilla invertida Kayaba Ø48…y el resultado es absolutamente contrario al de la Gas Gas. A ritmo tranqui se come las imperfecciones del terreno que casi ni te enteras, y esto abunda en una comodidad que al acabar el día hace que estés menos cansado. Pero ¡ojo! que al ser una suspensión tan blandita, hay que vigilar si en un momento dado quieres abrir gas y arrearle de verdad, ya que las reacciones del tren delantero serán muy lentas e imprecisas.

Por tanto, si quieres ir de tranquis, la horquilla Kayaba será una muy buena opción…pero si vas rápido tendrás que jugar con los settings…y el resultado final no lo sé porque a mi ya me van bien así de blanditas.

 

Suspensiones/Amortiguador trasero…: Muy bien en ambos casos, ya que se logra un equilibrio tacto/tracción/absorción/comodidad que resulta óptimo. No destacaría el uno sobre el otro, ya que los dos son de mi agrado, y además permiten un buen vano para su ajuste. Tan solo cuando ruedas sobre terrenos muy dispares donde se mezclen zonas muy duras de poca adherencia con zonas de mucha tracción y/o barro es cuando al igual notas que sea necesario en cada caso algún pequeño ajuste…pero para mi ambas funcionan muy bien.

 

Rodando por pistas amplias…: se puede rodar bien con ambas….aunque no es el territorio preferido de ninguna.

La Gas Gas mantiene el tipo hasta los 80km/h…a partir de ahí, el motor 2t ya vibra demasiado y resulta poco gratificante aumentar el ritmo. Si es poco rato todavía se aguanta…si en cambio es una ruta larga, mejor no pasar de esa velocidad, o al parar te tiemblan hasta las pestañas.

La Yamaha se comporta bien hasta los 90km/h…a partir de ahí, se nota que falta una 6ª velocidad y que el desarrollo resulta algo corto. Aún sin llegar al mismo nivel de vibraciones que en la Gas Gas, se nota que al aumentar esa velocidad, disminuye bastante el grado de confort.

 

Rodando por caminos pequeños rotos o muy rotos…: es un territorio idóneo para ambas motos…una y otra aguantan bien las caídas de rpm…pero preferentemente hay que llevarlas alegres a las dos!

La Gas Gas está en su salsa, siempre a punto para sortear zanjas y piedras con un simple golpe de gas. Su chasis está justamente aplomado y es muy noble de reacciones --> ambas características, permiten que la conducción sea bastante pareja tanto en subida como en bajada. Aún así, resulta muy ágil, acepta cambios de dirección poco anticipados, y siempre intenta describir la trazada que tú has previsto. A medida que aumenta la velocidad o aumentan las rpm, la tracción disminuye claramente y hay que estar atento con el embrague para atenuar un poco la respuesta del gas...ese incremento de velocidad potencia la agilidad de la moto, y puede ser estresante o adictivo, ya que sientes que dejas de ir en moto, para empezar a pilotar una moto.

La Yamaha también se desenvuelve muy bien. Su chasis es muy noble, pero bastante plomizo (cosa que hace que la conducción sea bastante diferente al ir en subida, que al ir en bajada), y necesita un poco de marcheta para espabilarse. A medida que empeora el camino es importante ir con un poco más de anticipación que con la Gas Gas, has de trabajar más con la posición de tu cuerpo sobre la moto, e intentar que la velocidad no sea demasiado lenta. Hay dos factores que penalizan un poco a la Yamaha: el 1º es que una suspensión tan blanda resta agilidad cuando el camino empeora y la velocidad disminuye, y la 2ª es su alto peso cuando se pierde la trazada buena (sobretodo con terreno mojado)…que no ocurre con frecuencia, pero cuando ocurre has de estar fuerte para hacerte con ella. Por el contrario, la respuesta del motor Yamaha es cojonuda, y hace que la conducción sea menos estresante y más sencilla que con la Gas Gas.

 

Rodando por sendas…: ninguna de las dos se queda rezagada. Partiendo de la base que una senda no es una trialera…en la medida en que ésta se vuelva más revirada o complicada, se incrementan las virtudes y los defectos de ambas motos. Así que por peso y agilidad es un territorio más adecuado para la Gas Gas…pero por docilidad y tracción la Yamaha reclama que también está en la pomada.

 

Rodando por trialeras de dificultad media o baja…: En mi opinión, si tienes buenas manos y cierta experiencia, es territorio Gas Gas. Tan solo le penaliza el no tener arranque eléctrico…aunque eso incrementaría su peso…pero claro, todo es opinable, y cada situación es diferente.

A mi juicio, el peso, la agilidad, las inercias, y un golpe de gas contundente a bajo régimen, son fundamentales…claro que cuando aparece la Yamaha con un motor 4t que tracciona de puta madre, que es poco exigente, y que además tiene arranque eléctrico, hace que tengas la duda de quien se desenvuelve mejor.

 

Rodando por trialeras de dificultad alta…: Lo cierto es que apenas me muevo por este tipo de terreno, es más, trato de evitarlo ya que no me produce ninguna satisfacción. En todo caso, tengo claros algunos puntos que habría que mejorar de cada una de estas dos motos para poder afrontar este tipo de enduro:

En la Gas Gas, habría que mejorar el embrague (sustituyendo discos o aceite por otros más aptos para situaciones de fatiga), dulcificar la respuesta del gas (regulando la válvula de escape)…y si eres bajito, incorporar arranque eléctrico.

En la Yamaha, tal vez habría que trabajar también con el tema del embrague y las suspensiones, pero básicamente opino que se trataría de bajar peso drásticamente ya que ese es su gran lastre. Si le fuera a dar este uso, no me quedaría con la Yamaha e iría directamente a buscar otro tipo de moto más apta para ello.

 

Autonomía...: son dos relojes en ambos casos...suelen fallar poco sus promedios...pero el consumo es muy dispar entre ambas. Cabe recordar que en el caso de la Gas Gas, hay que hacer la mezcla de aceite al 2% en cada repostaje (yo le hecho menos de un 1,5% con aceite GRO y sin problema), mientras que en la Yamaha no es necesario.

La Gas Gas permite hacer justo 100km antes de que salte la reserva --> así que su promedio es de 9l/100km

A la Yamaha le he llegado a hacer 125km y todavía sin tener que poner reserva --> tengo comprobado expresamente que su promedio son 5l/100km.

Como conclusión, la Yamaha gasta un 45% menos de gasolina…y tiene una autonomía de entorno a unos 35/40km más que la Gas Gas. Si solo haces trialeras, este dato tal vez te importa poco, pero si mezclas un poco de todo (con tendencia a hacer poca trialera dura), o te mueves por zonas donde la distancia entre gasolineras es grande, entonces sí que es importante tenerlo en cuenta…a partir de ahí, cada cual tendrá sus preferencias.

 

Conclusiones generales…:

La Gas Gas es una moto con una inequívoca vocación racing, que necesita cierta preparación, buenas manos, y un alto grado de concentración en el pilotaje ya que, aunque es noble y perdona muchos errores, te deja bien claro que para disfrutar con ella has de ir rápido, y has de estar a buen nivel.

La Yamaha sin embargo es una moto con tendencia más hacia el excursionismo endurero, que da pié a una conducción menos estresante (que no quiere decir sosa) pero alegre, y que al mismo tiempo te asegura unas muy buenas maneras cuando la cosa se complica.

 

Hoy por hoy, prefiero la Yamaha…aunque tengo claro que para que fuera la moto de enduro ideal, su peso debería bajar en torno a los 10/12 kilos…pero también es cierto, que si a la Gas Gas le hubiera podido montar el arranque eléctrico, no me hubiera desprendido de ella.

 

Espero que esta comparativa pueda servir de ayuda para aquel que por iniciarse o por buscar un cambio de estilo, no sabe si decidirse por el 2t o el 4t…

He intentado ser lo más objetivo posible ya que son dos motos muy dispares, y he basado todas las opiniones en mi humilde (y poco sabia) experiencia en este mundillo del off-road.

 

Saludos, y birras para todos!

 

Editado 16 de Marzo de 2017 por manpe30